¿Alguien se acuerda de Silvia Superstar? ¿Que cantaba en el grupo del mismo nombre de la película? ¿Que ponía la música en el anuncio de los refrescos Radical? Pues se fue a Alemania, donde tuyo mayor éxito que aquí, pero antes nos dejó este «regalito». Lo que no había percibido yo antes de verla, es que esta dirigida por Jesús Franco y eso quiere decir dos cosas:
Niebla artificial a porrillo y sobre todo LENTITUD y BOCHORNO. Jess Franco ha dirigido sopotocientas películas cutres de terror sobre vampiresas, películas soporíferas y lentas. No cabe duda de que tiene su… «encanto», eso sí, para quien le guste, porque a nosotors ni de coña.
Aunque por fortuna, nosotros contamos con la bendición de que no era una película 100% Jess Franco, la otra mitad es un videoclip de los Killer Barbys con mucho mucho sexo. Los Killer Barbys se dirigen a su próxima actuación y casualidades de la vida, se equivocan de camino y se quedan tirados con su furgón cerca de una mansión… originalísimo, vamos. El mayordomo de la mansión los invita a quedarse allí durante la noche, pero no todos acceden, ya que 2 mendrugos se quedan fornicando en el furgón toda la noche (ya llevaban fornicando todo el camino).
Y también muy original la condesa que vive en la mansión, que bebe sangre humana para mantener su eterna juventud… Lo que sí es originalísimo, es que se trata de la primera película íntegramente en «spanglish», aquí mezclan español e inglés que es una maravilla «Son las doce en punto, twelve oclock» «¡Marchad! Go away!». Cierto es que aunque se ahorrar el traducirla a la lengua de Shakespeare, con la mitad de los diálogos en inglés y la otra mitad en español, nunca se va a enterar uno de todo.
Destaca el papel de Santiago Segura en uno de sus papeles más penosos, haciendo de un chepudo acompañado por 2 enanos que hace el trabajo «sucio» de la mansión encantada, eso sí, no deja de lado su pajilla tradicional.
No comento más porque, ciertamente, la película NO lo merece en absoluto… y recordad una película de Jess Franco NO es una película Ascor. Saludos.
