Un amargado y solitario científico Nazi lleva 20 años encerrado en un laboratorio oculto en la América profunda, planeando su venganza contra la sociedad.
Sus colegas de profesión se reían de una poderosa formula que este genio perturbado había inventado, y que era capaz de transformar a los seres humanos en peces barbos andantes….
Pero el malvado doctor «Kurt Leopold» hará pagar muy caro al mundo su insolencia…..
Pues si, en esta delirante película de 1971 tenemos a un monstruo que no tiene nada que envidiarle a los del «Asylum», pues se trata de un barbo mutante humanoide que anda por ahí aterrorizando a la peña. De todos los posibles bichos del universo mundo, el doctor Leopold ha elegido precisamente al barbo, también llamado pez gato, para transformarse. Manda huevos…
Y es que viendo tantas y tantas películas de estas, como» Sky Sharks» o «La Bestia en Calor» yo a veces me pregunto: ¿Como es posible que los Nazis arrasaran media Europa teniendo en plantilla a tantos científicos locos y colgados varios? Un misterio digno de un documental de «Discovery Max».
En fin, tras unas infumables escenas de introducción rellenas de grabaciones de todo tipo de peces asquerosos que ni un japones borracho seria capaz de comerse, aparece nuestro científico loco. El prenda de la foto es el eminente doctor «Kurt Leopold». Como pueden apreciar tiene una cara de asco indescriptible, arrastra los pies por todo el laboratorio y tiene ademas pinta de volver de haberse llevado 4 días en la ruta del bacalao. Tras inyectarse un suero misterioso usando una jeringuilla que tiene una aguja para caballos, se mete en una pequeña piscina que no ha sido lavada desde que Hitler jugaba con un trompo y que está llena de otros misteriosos productos químicos. El tío se desnuda para meterse en el agua, pero tiene el detalle de dejarse los calzoncillos puestos, lo cual viendo su pinta agradecemos todos.
En ese momento el suero hace efecto y de la piscina emerge un monstruo ortopédico que a partir de ahora aterrorizará al pueblo matando a los lugareños a saco. «Zaat»!!!!
Como pueden apreciar en la instantánea, el mutante ese no es precisamente tímido. Muchos directores intentan no enseñar mucho al monstruo de turno por eso de la intriga… pero aquí nada de nada. Solo ha faltado que el director nos enseñara al engendro friendo croquetas, plantando un pino en el baño y jugando al bingo. «Zaat» se pasea impunemente y con toda tranquilidad por el medio de la calle, pasando debajo de las farolas y asomándose por las ventanas de medio pueblo.
También localiza y se cepilla sin piedad a algunos de esos antiguos colegas de profesión que se reían de él y que por lo visto viven casualmente por los alrededores. En una atroz escena, ataca un bote donde está uno de los científicos esos y mata a todos los ocupantes. En una increíble coreografía de lucha, mata a la mujer de su victima rozándola levemente con su zarpa. Si el tío es capaz de matar a alguien así, no nos imaginamos que será capaz de hacer si te calza una buena hostia.
Pero después del asalto, el monstruo localiza a una rubia despampanante que esta acampada en el mismo lago y se pone a observarla. Vale que sea un científico loco que se ha convertido en un barbo de 2 metros, pero también tiene sus necesidades como cualquiera. Así que acaba secuestrando a la pobre chavala con la intención de transformarla en un barbo hembra con el que poder echar polvazos submarinos para así crear una nueva raza de seres humanoides amorfos.
En este punto del argumento les aseguro que hay que tener mucha moral para seguir viendo esta película…
Bien, el experimento fracasa por alguna misteriosa razón que el director no se molesta en contarnos, así que el pescado loco asesino se lanza a aterrorizar al pueblo buscando otra chavala que convertir en cachucho y poder satisfacer sus impulsos pervertidos.
Evidentemente los lugareños se empiezan a oler la tostada, ya que nuestro engendro es de todo menos discreto, y los protagonistas de esto iniciaran una arriesgada búsqueda hasta lograr finalmente atar todos los cabos de la película y asaltar el laboratorio del monstruo, en gran parte gracias a la ayuda del engendro. No es buena idea dejar tu guarida secreta sin cerrar con llave ni ir dejando por ahí rastros de radiactividad que se pueden seguir con un contador «Geiger»…. en fin….en fin….
Finalmente el barbo mutante intenta transformar en monstruo a la chica del protagonista, pero se lo impiden en el ultimo momento. Viendo que esta todo perdido, coge un par de bidones de su suero transformador en cachuchos y escapa hacia el mar. El único de los protas que a estas alturas queda todavía en pie no logra pararlo, y el pescado mutante se hunde ominosamente en el mar…. Como es típico de las pelis de la época, no sabemos si el malo ha sobrevivido y logrará transformar a todo el mundo en pescaditos mutantes o finalmente la ha palmado por las heridas… FIN.
Les aseguro que esta obra de arte es mala, muy mala para el cerebro. Y eso que hay detalles electrizantes que no les he contado:
-En los primeros asesinatos el director intercala tomas del monstruo dando hostias con todo tipo de imágenes de los peces asquerosos que comenté al principio.
-El plan original del doctor maligno para vengarse del mundo incluye el soltar su suero mutante en el agua para contaminar a la gente. Les aseguro que las escenas del monstruo soltando la sustancia mutante con un cutre bote de spray limpia cristales mientras esta debajo del agua les perseguirá en sueños.
-Cuando el engendro ataca a uno de los protagonistas, la chica pasa olímpicamente de ayudar a su novio y se pone tranquilamente a hacer fotos de la pelea mientras el pobre capullo lucha por su vida con el besugo de 2 metros.
-Hay un numerito de música «Folk» metido con calzador en mitad de la película que acaba durando cerca de 5 minutos y que logra que tengas ganas de arrancarte los ojos.
-La carátula de la película dice textualmente que: «haría falta una bomba atómica para barrer al barbo ambulante»… pero créanme que el protagonista solo necesitó meterle un par de puñaladas traperas para ahuyentarlo y dejarlo para el arrastre.
-Parte de la banda sonora esta hecha estrangulando un organillo Casio. Claro que alguno de ustedes pensara: «Puff, que de veces se dice esto cuando se hace una reseña de la música de una película cutre». Y tambien pensaran que: «ya están otra vez con el chistecito gastado del organillo Casio»… Pues nada señores, les dejo una grabación de la música de ambiente de una de las escenas de esta película, y les reto para ver si tienen ustedes los santos cojones que hacen falta para oírla entera. Yo desde luego me estoy planteando poner esto de «politono» para el móvil…
– Aparte de las típicas sombras que dejan los técnicos de la película, y de también las inevitables sombras de micrófonos sobre las cabezas de los actores, observaremos también un detalle de buen cine que nos dejará asombrados. Desgraciadamente debido a la pobre calidad que tenia la copia de la película que pude conseguir puede que no se aprecie bien, pero les aseguro que el monstruo lleva en esta escena zapatillas de deporte. Si señor!! Aunque seas un monstruo lo mejor es ir en tenis para ir muy cómodo por la guarida.
Y eso es todo señores… les aseguro que no puedo mas. Como guinda final les dejo la ficha IMDB de este pestiño.
También les dejo el «trailer» de la película:
Y para aquellos de ustedes que sean muy masoquistas les dejo un vídeo con una secuencia completa de esta obra maestra. Les cuento: Cuando el monstruo se pega con el protagonista y recibe las puñaladas, decide después atracar una farmacia para conseguir medicamentos que por lo visto el tío cutre no tenia en su laboratorio. La secuencia en cuestión es un rollazo de campeonato, pero les permitirá hacerse una idea de lo que significa tragarse esta película entera…..
