Ayer acaparé valor, y decidí ponerme a ver esta joya que teníamos aparcada hace tiempo. Y digo aparcada porque estos cobardes no se atrevieron a verla en su momento. Los 80 fueron una época fabulosa para los amantes de la «espada y cutrería», docenas y docenas de incompetentes pensaron que podrían seguir la estela de Conan El Bárbaro y hacer unos dinerillos fáciles. A la hora de la verdad, todos, absolutamente todos (incluido el «chuache» con la 3ª parte bastarda) habían hecho una montaña de VHSs de mierda que solamente sirven para hacer una buena fogata.
Esta cinta no es una excepción, con 4 partes, Ator es la saga de espada y cutrería más pesada junto a Deathstalker. El que las películas no costasen un puto chavo, unido a lo motivados que estaban los impresentables de los productores, les dejó rienda suelta para atormentar las estanterías de los videoclubs durante años, acompañados por joyas como la de los Hechiceros. No quiero ni pensar cuánta mierda de esta se tragó mi padre tanto en la televisión a horas inhumanas como alquilándolas voluntariamente en el videoclub.
Y aquí estamos, la segunda venida de nuestro follahermanas favorito. La película comienza con unos cavernícolas comiéndose los piojos unos a otros (lo mejor de la película sin duda), con una voz en off contando la típica fumada contando la vida y obra de Ator, contando lo macho que es, y un montón de gilipolleces que no le importan a nadie. De repente se monta una batalla campal en la cueva con los entes simiescos peleando entre sí, esto no tiene absolutamente nada que ver con el resto de la película. Después nos trasladan a una cueva donde el rey X le cuenta a su hija los poderes de un artefacto que conserva en su haber y la desgracia que supondría que los malos descubriesen como desatar sus poderes. Casualidades de la vida, y como suele ocurrir en este tipo de películas, de golpe y porrazo los malos ya están asediando el castillo. No pasa nada, el rey todavía tiene tiempo para hablarle a su hija de Ator y resumir la primera película entera en 5 minutos.
Los malos secuestran al rey y la hija escapa en busca de Ator. Yo no sé qué mierda pasa en estas películas que los protas nunca tienen un mísero caballo y nos deleitan con innumerables escenas de nuestros antihéroes corriendo bosque y llanuras a través. Ahora que lo pienso mejor, en esta película no hay caballos, y si los hay, son 2 o 3… vamos, que no tenían un puto chavo ni para alquilar un equino. De hecho, tuvieron tan poco presupuesto que el taparrabos de Ator ya le deja medio culo al aire.
Ator vive en el culo del mundo, con un chino que le enseña movidas chungas. La chica llega malherida, y una vez curada y demás, Ator se hace el duro escribiendo con pluma un libro y diciéndole que no la cree, que tendrá que demostrar de quién es hija mediante el paso de una prueba diseñada especialmente para ella. La prueba es absurda, la mete en una cárcel y tiene que salir de ella… hay que ser anormal para hacer una «prueba» esperando a que algún día aparezca la persona a la que va destinada. Con esto montado, inician la aventura.
Como imaginareis, a partir de aquí empieza el tópico de este tipo de películas, un montón de desventuras sin sentido ni continuidad en un orden irrelevante. La típica niebla invocada por un brujo que hace que se pierdan en el bosque, guerreros invisibles, sacrificios humanos en una cueva, aldeas arrasadas por bárbaros… Momento de especial mofa es el momento del viaje en el que se cruza en el camino de nuestros «héroes» un popurri de guerreros orientales: una especia de samurai, un tipo disfrazado de guerrero mongol, un tipo con unas perchas en los hombros… sencillamente deleznable. También memorable el momento en el que Ator se enfrenta al dios serpiente, si en la primera le tocó al dios araña, pues ahora el serpiente… ya os lo podreis imaginar, una serpiente de goma enorme.
Y como apartado especial, la escena de la película, Ator coge un ala delta y bombardea a los soldados del malo (un marica con peluca y bigote postizos con los ojos perfilados y ultramaquillado), que estan en un castillo que no pega ni con cola con el decadente y cutre mundo que hemos visto durante el resto de la película…
